Estos cojines los diseñé para un departamento en Santa Fe (México, DF) decorado por Alejandra Jiménez, quien pensó en Herminia Mor para darle el toque final de color y olor al espacio.
La verdad es que el simple hecho de crear pensando en el espacio íntimo de una persona es una actividad fascinante: ¿cómo es? ¿cuáles son sus gustos? ¿con qué colores y combinaciones se sentirá mejor? ¿se agobiará con éste naranja? ¿le parecerá muy elegante este satín o le hará sentir regocijo Lady Di? Tantos factores para lograr un resultado placentero que resulta un auténtico placer el proceso.
Así que bueno, tras diseñar los cojines para la sala, habitación y comedor de Lili, fui a hacerles una súper muestra de telas y olores a domicilio. Finalmente, se decantaron por tonos turquesa para los cojines de la habitación y les propuse el olor a vanilla musk. Es un aroma tan delicado y femenino que es fantástico para relajarse y quedarse dormido (yo lo tengo en los cojines de mi habitación y puedo asegurar que funciona mejor de lo que algunas mañanas querría). En la sala y el comedor la gama de color siguió en tonos azules y grises y el olor elegido para los cojines fue uno más potente y dinámico: uva dulce.
Las tres quedamos muy contentas con el resultado y, como siempre, fue genial trabajar en colaboración con Ale.
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